DFSi en algo coinciden los residentes de Ibiza es en que Santa Eulalia es uno de los municipios más tranquilos y mejor cuidados de la isla. Una localidad que conserva muchas de las tradiciones de antaño, que valora su cultura, sus recursos y a su gente y en la que sentirse a gusto es sumamente sencillo.
Uno de los aspectos más sorprendentes de Santa Eulalia es que posee el único río de Baleares, que además le otorga su sobrenombre “Santa Eulalia del río”. A día de hoy su caudal es escaso y su extensión tampoco es enorme, sin embargo recorrerlo por el paseo de principio a fin es una estupenda opción.
Es Puig de Missa preside la ciudad desde las alturas. Se trata de la iglesia más importante del municipio, un conjunto arquitectónico que merece la pena visitar por su gran belleza. Ubicado sobre una colina, la panorámica que ofrece de Santa Eulalia es una maravilla.
Sus inmediaciones esconden secretos como el Museu Barrau o el Museo Etnográfico, ubicado en una bonita casa payesa reformada.
Es Puig de Missa servía como refugio ante los ataques de piratas
Si justo pillas la Semana Santa no te pierdas la procesión en este lugar. Realizan una sorprendente representación de este acontecimiento religioso.
¡Ya has visto dos de los puntos más importantes del pueblo! Es hora de que conozcas el paseo marítimo. Si accedes a él desde el paseo de s’Alamera, en pleno centro, podrás incluso darte un baño en la playa. Te sorprenderá la cantidad de bares y restaurantes que se extienden a lo largo de esta zona. Si te ha entrado el hambre, es un buen sitio para saciarlo, así como la famosa ‘calle de los restaurantes’ (carrer de Sant Vicent), unas calles más arriba.
Mercadillos hippies en Santa Eulalia
Santa Eulalia congrega los dos mercadillos hippies más famosos de Ibiza: el de Punta Arabí y Las Dalias.
El primero lo encontrarás en el núcleo turístico de Es Canar. Se celebra todos los miércoles, de abril a octubre, y es uno de los más extensos de la isla. En él podrás hacerte con cualquier souvenir que puedas imaginar.
El mundialmente conocido Las Dalias lleva celebrándose nada más y nada menos que desde 1954. Es sin duda el más celebre de Ibiza, una de esas visitas obligadas en tu viaje. Joyería, ropa, arte… En Las Dalias hallarás cualquier cosa que busques. Además, es conocido también por su nutrida agenda de eventos. Sus fiestas y conciertos en directo atraen a cientos de personas cada verano.
Piérdete una mañana por el mercadillo hippie de Las Dalias Ibiza
Los residentes pueden disfrutar también los domingos del mercadillo de cala Llenya, en esta misma playa. Puestos con artesanías y un ambiente 100% auténtico y divertido.
Playas en Santa Eulalia
¡Llegó la hora del baño! Salvajes, urbanas, familiares… Santa Eulalia tiene playas y calas de todo tipo. Aigües Blanques es una de las más conocidas. Limitada por acantilados y con unas vistas increíbles, darte un chapuzón aquí, embadurnarte en barro natural o tomar algo en el chiringuito es casi una obligación.
Cala Boix es la única playa de arena negra de Ibiza, cala Nova destaca por sus cristalinas aguas y cala Leña por ser perfecta para las familias.
Date un baño en las cristalinas aguas de Cala Nova
Si te da por acercarte hasta cala Mastella te toparás con una tranquila cala con un diminuto puerto de pescadores. Si te gusta el pescado debes hacer una parada en el único restaurante que verás allí. 100% Ibiza.
Pueblos en Santa Eulalia
Si de algo saben en los pueblos es de comer bien y en los de Santa Eulalia no se quedan atrás. Tras tu visita a Las Dalias puedes acercarte hasta San Carlos para probar la bebida por excelencia de la isla: las hierbas ibicencas. Unos montaditos y una copa de hierbas en Ca n’Anneta es uno de los hábitos más extendidos entre los residentes. Antes de llegar al mercadillo verás también el mítico restaurante Ca’s Pagès. Comer aquí es una costumbre típicamente ibicenca que deberás llevar a cabo si quieres conocer de primera mano la gastronomía de Ibiza.
Otra de las zonas clave a la hora de disfrutar de una buena cena o una intensa jornada de compras es Santa Gertrudis. Un pequeño pueblecito que desprende un encanto único. Pasar por el Bar Costa es indispensable. Abarrotado siempre de gente, no esperes comer según qué exquisiteces. Aquí se viene a probar sus ricos bocadillos y sus tapas de embutidos.
Niños y actividades deportivas
Santa Eulalia es una de las zonas favoritas por el turismo familiar. Es Canar o Cala Llonga son los núcleos turísticos que concentran más locales y actividades orientadas a los más pequeños. En la villa del río podrán disfrutar de ferias, un circuito de kars, cine o un parque de tirolinas y puentes colgantes que les encantará.
Las playas de Santa Eulalia son ideales para la práctica del submarinismo
Para los más mayores existen varias rutas cicloturistas y de senderismo. Además, en sus playas los deportes acuáticos están a la orden del día. Velomares, paddle surf, motos de agua, submarinismo… no tendrás problema a la hora de practicar tu hobbie favorito. Asimismo, Cala Llonga posee el único club de golf profesional de la isla.
Ocio y relax
En Santa Eulalia existen un gran número de agroturismos en los que podrás perderte y desconectar del día a día. Atzaró Ibiza o Can Curreu son solo algunos de los que deberías visitar si quieres contemplar de lleno la belleza de la Ibiza más natural. Por cierto, ambos cuentan con un fantástico spa.
A la hora de salir, olvídate de las discotecas abarrotadas de gente. Tomarse una copa en el Paseo Marítimo, frente al mar, es una buena idea. También lo es hacerlo en la azotea de hoteles como W Ibiza Hotel, en el camaleónico mercadillo de Las Dalias o en restaurantes de playa como Atzaró Beach o Chirincana.
El aburrimiento en esta localidad no tiene cabida. Familias, jóvenes y no tan jóvenes encuentran en Santa Eulalia todo lo que esperan de unas vacaciones de ensueño.